Reflexion de la Semana Patria de la Comisión Especial de Mujer y Género.
LAS MUJERES COMO FUERZA EMANCIPADORA.
Presento este artículo de divulgación que pretende dar luz a las valientes de nuestra historia; a 210 años de la Revolución el 25 de mayo de 1810 se escribió con puño y sangre de hombres que pregonaron la libertad e igualdad, pero como dice el “actual” dicho popular, "A la par de todo gran hombre hay una gran mujer". Fueron hijas, esposas, madres y hermanas, que buscaban hacer tambalear el poder colonial y desnaturalizar las desgarradoras injusticias políticas, económicas y sociales de la época.
Para reconstruir la historia de “las mujeres en tiempos de revolución” debemos comenzar por encumbrar dos gestas anteriores “Las Rebeliones Indígenas y las Invasiones Inglesas”.
LA GRAN REVOLUCIÓN ANDINA
Encabezada por el Inca Túpac Amaru II, (1780) y Túpac Katari (1781) tuvo decenas de miles de indios armados; las mujeres de las comunidades Quechuas y Aymaras se sumaron a los ejércitos rebeldes para ayudar en su logística y abastecimiento, pero muchas de ellas también se contaban en las filas de los combatientes.
Así se preparó la insurrección más extraordinaria de la que tenga memoria esta parte del continente, los pobres, los niños de ojos tristes, los viejos con la salud arruinadas por el polvo y el mercurio de las minas, las mujeres cansadas de ver morir en agonías interminables a sus hombres y a sus hijos, todos comenzaron a formar el ejército libertador. Las crónicas registraron, en especial, el nombre de dos de ellas, posiblemente por ser esposas de ambos líderes:
MICAELA BASTIDAS
Siempre junto a Túpac Amarú en esa lucha que se prolongó hasta que un ejército realista que reunía a todas las tropas del Virreynato de Perú y Río de la Plata, logró derrotarla en abril de 1781, Micaela y la cacica del Pueblo de Arcos de Perú, fueron torturadas, condenadas a muerte y ejecutada en la plaza mayor de Cuzco, junto a los principales jefes, antes Micaela debió presenciar la tortura y muerte de su hijo mayor.
BARTOLINA SISA, (esposa de Túpac Katari)
En el levantamiento del Alto Perú, tuvo un papel fundamental, pusieron sitio durante más de tres meses a la ciudad de la Paz. Pero Katari fue traicionado y Bartolina capturada por los españoles, utilizándola como rehén para lograr la entrega de su marido. Durante meses se la sometió a tortura hasta que en septiembre de 1782 la ejecutaron en la plaza mayor de la Paz, fue ahorcada y su cuerpo descuartizado para exhibir sus partes como escarmiento en distintos lugares del Alto Perú.
ACTUACION FEMENINA EN LAS INVASIONES INGLESAS
Las Calles de Bs As se convirtieron en escenario de lucha armada y las casas en centros de debates conspirativos, las mujeres porteñas fueron piezas claves en los combates de la reconquista, arrojaron grasa hirviendo, agua caliente y objetos contundentes contra los soldados ingleses, también estuvieron en la línea de fuego, algunas disparando, otras recargando los fusiles y otras haciendo tareas de espionaje, fue con tanto coraje su desempeño, que los mandamases de entonces no tuvieron más remedio que colocar sus nombres y sus acciones en los partes oficiales:
MANUELA PEDRAZA, LA "TUCUMANESA" (1806)
Se sumó a la lucha en torno a la plaza Mayor (actual Plaza de Mayo) combatiendo al lado de su marido (Cabo José Miranda) con sublime entereza mató al soldado inglés presentándole el fusil, al jefe de las fuerzas Santiago Liniers, quien en 1807 le otorgó el grado de subtenienta de infantería. La voz maravillosa de la querida Mercedes Sosa, ennobleció a esta heroína de la patria, en su disco Mujeres Argentinas (1969) al difundirse el tema “Manuela la Tucumana”.
MARTINA CÉSPEDES (1807)
Propietaria de una pulpería que engañando capturó a doce soldados ingleses con la ayuda de sus tres hijas y según cuenta la leyenda la señora entregó a Liniers sólo once soldados y fue nombrada "Defensora de Buenos Aires" Sargenta Mayor del Ejército, se la vio por muchos años en las procesiones de Corpus Christi luciendo orgullosa su uniforme. Pero… ¿Qué pasó con el inglés que faltaba? Josefa una de las valientes hijas de Martina, miró con buenos ojos al soldadito y la historia terminó en casamiento (y si además de valerosas, también nos enamoramos).
MARIE ANNE PERICHON llamada "La Perichona”
Como amante del nuevo hombre fuerte de Buenos Aires, Santiago de Liniers, Anne se convirtió en espía ante los británicos, en defensa de los intereses de la reconquista, actuando como vocera tanto en los negocios como en las acciones políticas. Los amores de la bella Anita con el Jefe del cabildo fueron un escándalo en la ciudad porteña, pero ella enamorada y orgullosa llegó a usar uniforme militar y pasearse montada a caballo. Se decía: “Puede todo lo que quiera sobre su espíritu”, pero la sociedad de elite colonial pudo echar por tierra ese amor y Liniers tratando de “defender su nombre y su honor”, la acusó de conspiradora haciéndola embarcar y expulsándola. Luego de mucho tiempo, angustias y deportaciones Anita pudo instalarse (encerrada) en una estancia en la Matanza, allí nació una de sus hijas “Camila O’ Gorman”…
LA REVOLUCIÓN DE MAYO LLEGA A LAS CRIOLLAS.
Cuando se evoca el 25 de Mayo los asociamos a sus protagonistas masculinos, sin embargo, y aunque se las haya dejado de lado, hubieron grandes mujeres en la causa revolucionaria. La "politización", en mayor o menor medida, alcanzó a muchas de ellas, ya sea en el seno de la familia y en las tertulias, como en los atrios de las iglesias, los mercados, se dice que muchas de ellas probablemente vestidas de varones lograron ingresar al Cabildo. Hubo damas que cargaron el peso de la revolución en sus espaldas, las que tuvieron que trabajar para mantener a sus familias porque sus maridos e hijos fueron enviados a los ejércitos. Algunas lucharon a la par de sus hombres, y otras, más visibles, rompieron los moldes de la época.
JUANA MARÍA PUEYRREDÓN O'DOGAN (1809)
Hermana de Juan Martín de Pueyrredón, uno de los principales precursores y líderes del movimiento emancipador. Acusado de opositor fue preso por orden del virrey Cisneros, entonces Juanita se presentó ante los guardias del Regimiento de Patricios y con la elocuencia del alma, la palabra fácil e insinuante, increpó a los soldados de “servir como instrumento a la tiranía contra un paisano, sin otro crimen que el entusiasmo por la libertad de su patria, no patricios, dejad libre a mi hermano, sino queréis ser cómplice de una iniquidad que amenguaría vuestra fama”… La tropa escuchaba y llenos de admiración y respeto por la ilustre argentina, dos horas más tarde las ventanas del cuartel se abrieron sin guardias… Juanita es considerada una de las Patricias Argentinas, y solo pudo disfrutar dos años de la libertad por la que tanto luchó, murió con tan solo 37 años en 1812.
MARIQUITA SÁNCHEZ DE THOMPSON
Quien rompió con las convenciones de la época y se opuso a su padre casándose con Martín Thompson. Fue organizadora de reuniones donde asistían intelectuales, comerciantes y políticos nacionales y extranjeros. Su casa amparó a las personalidades de su época, atraídas por la hospitalidad y el espíritu independentista de la dueña. Los problemas más delicados eran debatidos allí, lo mismo que los temas literarios. Se dice que allí se cantó por primera vez el Himno Nacional Argentino, puede que esto sea una leyenda, pero lo que sabemos con seguridad es que en estas reuniones hombres como Juan Martin Pueyrredón tejieron y destejieron alianzas políticas y formaron asociaciones como la Sociedad Patriótica.
MARÍA GUADALUPE CUENCA, esposa de Mariano Moreno
Fue otra de las mujeres protagonistas de la época, como “agente de inteligencia”. Ella opinaba sobre la situación política con fervor patriótico y sus cartas constituyen un valioso testimonio de su historia de amor y del momento político de Buenos Aires, a pesar de que las esquelas nunca llegaran a destino porque su marido había muerto envenenado en alta mar.
PATRICIAS ARGENTINAS
Para armar, vestir y proveer a los ejércitos patrios los aportes de las mujeres fueron destacados y consagrados sus nombres en el recién fundado periódico “Gaceta de Bs As” por Mariano Moreno: Dña Casilda Igarzábal de Rodríguez Peña; Bernardina Cavaría de Viamonte; Mercedes Lasala de Riglos (primera presidenta de la Sociedad de Beneficencia), Manuela Otálora de Soler; María Josefa Acevedo de Belgrano; María Ignacia de Riglos, La parda Basilia Agüero, María Josefa Tapia, Juana Pavón, Petrona Delgado de Marchán, y muchas otras que sería largo de enumerar.
También Moreno en la misma Gaceta, registra para la historia el nombre de mujeres y niños del pueblo: Como el caso de la esclava María Eusebia Segovia, con licencia de su amo, ha donado un peso fuerte y se ofrece como cocinera de las tropas. Moreno redacta “Causa ternura el celo con que se esfuerza el pueblo para socorrer al Erario…Las clases más pobres de la sociedad son las primeras que se apresuraron a consagrar a la Patria, una parte de su escasa fortuna: ¿Empezarán los ricos las erogaciones propias de su caudal? Pero, aunque el comerciante excite la admiración por la gruesa cantidad del donativo, no podrá disputar ya al pobre, el mérito recomendable de la prontitud de sus ofertas”. (Cualquier parecido con la realidad, es pura coincidencia…)
También harán sus donativos a lo largo de la guerra de la independencia, las cordobesas, tucumanas, santiagueñas, salteñas, correntinas y las cuyanas destacamos a las SANJUANINAS: Ana María Sánchez de Loria; Teresa Funes de Lloveras; Bernarda Bustamante de Cano y Jacinta A. de Rojo.
MUJERES DEL OPERATIVO TIERRA ARRASADA (1812)
Conocido en la historia como “Éxodo jujeño” evidenció una vez más el combativo espíritu de mujeres, con sus ancianos padres y sus hijos chicos de la mano, abandonando casas, predios y pueblos, integraron la caravana de la esperanza, bajo las órdenes del Gral Belgrano.
LAS CÉLEBRES “NIÑAS DE AYOHUMA”
Un valeroso grupo de mujeres que ayudaron durante toda la contienda del ejército del Norte, cuidando a los heridos en los frentes de batalla, dando agua e incluso luchando junto a los soldados independentistas.
MARÍA REMEDIOS DEL VALLE
Lamadrid no duda en llamar a esta argentina de origen africano como “la Madre de la Patria”; una liberta parda, destacada por su gran actuación en los ejércitos de Belgrano, partió en la primera expedición y combatió en Huaqui; vivió las trágicas pericias de la retirada en el Alto Perú y el éxodo jujeño, volvió a combatir en las gloriosas victorias de Tucumán y Salta y en las trágicas derrotas de Vilcapugio y Ayohuma, siempre junto a su Gral Belgrano que la había nombrado capitana, siempre con un grito de aliento, curando heridos, sacando fuerzas de donde ya no había. En esta última batalla fue tomada prisionera por los realistas, que la condenaron a ser azotada públicamente a lo largo de nueve días. Pero María pudo fugarse de sus verdugos y reintegrarse a la lucha contra el enemigo operando como correo en el peligroso territorio ocupado por los invasores. Estuvo a punto de ser fusilada, a lo largo de su carrera militar recibió seis heridas graves de bala. No fue fácil que las autoridades de Buenos Aires le reconocieran el grado de capitana, con el sueldo correspondiente, pero lo logró, aunque luego de la independencia, como ocurrió con tantas otras y tantos otros patriotas, el Estado dejó de pagárselo, finalmente y luego de encontrarse abandonada sin familia (esposo e hijos murieron en combate) y mendigando limosnas en 1827 le reconocieron el sueldo de capitana de infantería. (30 míseros pesos mensuales).
Hasta aquí vamos a desarrollar esta parte de la historia, dejando para la próxima publicación las mujeres protagonistas de las Guerras por la libertad y la Declaración de la Independencia en 1816 como la Generala Juana Azurduy y Macacha Guemes.
Consideramos que la historia tiene una deuda con las mujeres de la Revolución, La historiografía tradicional las ha excluido de la historia universal, sin embargo, ELLAS construyeron su identidad mediante las relaciones familiares, la cultura, el trabajo, las actuaciones políticas y en los mismos frentes de batalla al punto de perderlo todo. Humildemente elevo el presente documento para que Nunca olvidemos a nuestras Heroínas de la Patria.!!!!
Bibliografía:
“Mujeres que Construyeron la Patria”; Ministerio de cultura de Argentina. Sitio web oficial.
“Mujeres de la Conquista”. Galvez Lucía. Ed. Punto de Lectura. Bs As 2007
“Mujeres en la Sociedad Argentina, una historia de cinco Siglos”. Autora Dora Barrancos. Ed Sudamericana. Bs As 2010
“Mujeres Tenían que Ser”, historia de nuestras desobedientes, incorrectas, rebeldes y luchadoras desde los orígenes. Autor: Felipe Pigna. Ed. Planeta 2012.